Empezamos de nuevo.

A parte del gran cambio y el ajetreo que he vivido este verano, traigo novedades.

He empezado el temido bachillerato.
He cambiado archivador por libreta y ahora lo arrastro todo por los pasillos desde las ocho de la mañana. Soy como un alma en pena, desorientada y sin rumbo fijo. Con el cambio de educación obligatoria a no obligatoria, también hemos cambiado de centro. Estoy en un sitio más grande y con más gente, y es horrible por que no tengo ni idea de donde está cada clase y a veces, incluso tengo que cambiar de edificio. Imaginadme a mí, más gorda que antes, de metro sesenta, caminando por pasillos lleno de hormonas y semiarrastrada por la muchedumbre.

Pero hay otra cosa nueva en mi vida.
Quiero hablaros de algo personal, un proyecto que ha entrado en mi vida de golpe, con una fuerza increíble y que me está abriendo muchas puertas en muy poco tiempo.
Se llama Emisión en Diferido. 
Este verano, gracias a las redes sociales, un chico contactó conmigo y me dio la oportunidad de participar en una página web en la que se escribían artículos de todo tipo. Moda, cocina, música, viajes.... Llegó hasta aquí y leyó algunas de las entradas que había escrito y me presentó la idea, así, sin contemplaciones.
Me ofrecía formar parte del equipo, escribir sobre lo que quisiera, cuando quisiera y como quisiera. Hacerlo por mi cuenta y enviárselo para que luego él lo publicase en la página.
Y como cabía de esperar, acepté.
Ahora escribo una vez a la semana un artículo relacionado con la sociedad en el que me desenvuelvo con un tipo de escritura distinto, algo más parecido al periodismo.
Y sinceramente, me encanta.

Por otro lado, quiero empezar con algo diferente.
Quiero llevarlo todo un paso más lejos. Quiero tocar otros ámbitos y quiero crecer, no tan solo como persona, sino como escritora e intento de poeta.
Lo intentaré y subiré cosas nuevas, a ver qué sale de eso (y no hablo de textos).

Al principio de este año, me convencía a mi misma de que todo iba a ser una mierda y de que mi vida iba a ir cuesta abajo. Estaba totalmente segura de que iba a ser así, y en realidad, el año empezó así. Problemas familiares, un gran desamor y algunas caídas precipitadas. Pero todo va mejorando y puede que me anticipe demasiado al decir esto, pero le veo grandes expectativas a mi futuro.

Como dice Batania:

La poesía ha vuelto y yo no tengo la culpa. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario