Llegó y se presentó. Me dijo su nombre y le dije que ya lo sabía, que ya sabía quien era. Me miró extrañado, como si fuese imposible que ya lo supiese, como si nunca me hubiese visto en la vida.
Le dije de qué
- Te juro que nunca te he visto.
Por que nunca he sido lo suficientemente importante como para que se fijen en mi sin que otra persona que esté a mi lado llame la atención.
¿Entendéis lo que quiero decir?
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