La vida de las estrellas es muy corta. Duran miles y millones de años, pero aún así, comparándola con los años que dura la historia, es muy corta.
Un hombre hoy me explicó la vida de las estrellas. Primero, nacen a partir de la nada, a partir de una explosión se crean esos maravillosos astros que pueblan nuestro cielo, luego tienen una vida corta, de unos cuantos miles de años y tras ellos, tras esos años de vida dando luz y calor, surge una gran bola de fuego roja, después ésta se convierte en una pequeña estrella, a la que llaman estrella blanca, y luego, se convierte en un estrella latente, que parpadea periódicamente.
El sol es un estrella. El sol pasará por ese ciclo y el sistema solar, la tierra, la vida y nosotros con él.
Esa no es la cuestión.
La intriga viene ahora. Según este sabio hombre al que aprecio muchísimo, el sol, tras esa explosión, será absorbido por el agujero negro en el que se centra nuestra galaxia.
El sol será absorbido.
Nosotros con él.
Se quedará dentro de ese agujero hasta que vuelva a nacer, a crearse un astro similar. Se creará otro sol, otro sistema solar... ¿Otra Tierra?
El universo se expande y se contrae continuamente, nosotros con él y desaparecemos y aparecemos eternamente. ¿Hasta donde tenemos que remontarnos para saber el inicio de esto? ¿Cuántas veces ha sucedido? Si esta hipótesis es cierta... Yo ya he vivido. Tú ya has vivido.
Todos hemos vivido y hemos tenido la misma vida, una y otra vez, desde que todo comenzó. Desde que lo desconocido está ahí, desde ese mismo momento, nosotros ya empezábamos a crecer y a desarrollarnos.
¿Cuántas veces hemos amado?
¿Cuántas sufrido?
¿Y cuantas veces se repetirá esto?