Despreciada por una familia, un hermano, un padre y una
madre, por unas primas y unos amigos que se supone que iban a estar ahí. Me
siento despreciada por aquellos que están lejos y que han encontrado a alguien
mejor que yo, despreciada por aquel que roza la locura y por el que me ama.
Pero sobre todo, me siento despreciada por esa que me mira
desde el espejo, que me devuelve una mirada extraña con un deje de tristeza y
un rostro de rabia.
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